- Nombre de la asignatura: Economías Emergentes en Bio-regiones Productivas
- Profesorado: Tomás Vivanco y Tomas Diez Ladera
Programa de estudios:
Las ciudades vuelven a ser objeto de obsesión en el siglo 21. Durante generaciones, tanto arquitectos, diseñadores, urbanistas, ingenieros, sociólogos, economistas, políticos y organizaciones, hemos enfocado nuestras energías en imaginar y crear un “nuevo modelo” de ciudad: verde, sostenible, circular, inteligente, abierta, humana, por nombrar algunos adjetivos usados en esa búsqueda, e imaginar nuevas relaciones entre lo natural y lo artificial, la biología y la tecnología, o la religión y la ciencia (Spencer; Mumford; Papanek). Debido a su complejidad, y la interdependencia de las ciudades con otros sistemas tecnológicos y biológicos, estas no pueden ser consideradas objetos en sí mismas y tampoco independientes o auto-sostenibles, ya que son redes complejas de relaciones e interdependencias multiescalares. Las formas de vida no humana y los humanos, en especial los individuos y las comunidades, somos quienes tejemos esas relaciones entre la ciudad y los sistemas que hacen posible su existencia. Estas relaciones se manifiestan especialmente en las logicas de produccion y consumo humanas, acentuadas especialmente a partir del siglo quince luego de la ocupacion de las indias orientales y occidentales por parte de Europa, y las subsecuentes apropiacion de recursos naturales y dominacion cultural, lo cual nos han llevado a convertir el planeta en una mina industrial alimentada con petroleo ficticiamente barato, control de cadenas de suministro y distribucion a partir de la militarizacion de territorios, y el perfeccionamiento de nuevas formas de esclavitud para garantizar la mano de obra ficticiamente barata y perpetuar dependencias economicas entre clases.
Las ciudades son las responsables de la mayoría de emisiones de CO2, también concentran la mayor cantidad de población del planeta. Estos impactos seguirán incrementándose, por lo que es necesario imaginar y poner en práctica un modelo económico de ciudad que sea regenerativo con los sistemas de los cuales depende; que permita la diversidad cultural en relación a la generación y circulación de valor propias a escala local; que contenga en sus principios lógicas de cuidado entre todos los sistemas naturales que interactúan en la ciudad, incluyendo a las personas dentro de estos; y que permita integrar tecnologías al servicio de las dichas formas de vida que interactúan en la ciudad y sus bioregiones, y no al contrario. La iniciativa global Fab City, nacida entre Barcelona y Boston, toma todo esto como punto de partida para poner en marcha dicho modelo que los átomos dejan de viajar miles de kilómetros para llegar a nuestras manos y estómagos, y que en su lugar se mantienen circulando a escala local, y que los bits de información sean los que viajen miles de kilómetros alrededor del planeta, gracias a la revolución digital en la computación, las comunicaciones (Internet) y la fabricación como infraestructuras clave para desarrollar durante las próximas décadas un modelo urbano enfocado en el desarrollo de ciudades y bioregiones productivas. Es así como la fabricación y la producción en las ciudades podrían ayudar a aumentar la resiliencia de los ciudadanos y recuperar la capacidad de satisfacer las necesidades de las comunidades a nivel local, proporcionándoles tecnología que podría ayudar a:
- Impulsar la producción de una gran cantidad de alimentos de proximidad a centros urbanos, reduciendo el consumo energético en el transporte, mejorando la calidad nutritiva de los mismos, y la transparencia en las cadenas de suministro.
- Transformar el modelo de producción de energía a escala local, utilizando diferentes tecnologías complementarias de microgeneración y distribución.
- Aumentar el uso de nuevas materias primas a partir de materiales considerados como residuos, asociados al aumento de la demanda de la capacidad industrial existente en las ciudades y las zonas periurbanas.
- Reducir el movimiento de materiales a escala global y el exceso de producción, ya que las ciudades pueden producir lo que necesitan bajo demanda, utilizando principalmente materiales locales.
- Repensar la infraestructura urbana necesaria para proporcionar a las ciudades la capacidad de ser productivas, con infraestructura para transformar el metabolismo urbano, incluidos biodigestores, biorefinerías, bibliotecas de materiales, fábricas flexibles como clave a gran escala y fab labs como centros de aprendizaje y creación de prototipos.
- Desarrollar repositorios de diseños y nuevas tecnologías en código abierto para la regeneración de los sistemas vitales naturales en las ciudades y sus bioregiones.
- Aumentar la soberanía tecnológica de las ciudades gracias al aumento de la infraestructura y el conocimiento para el apoyo de un modelo de innovación local, conectado a redes de conocimiento a escala global.
Profesorado:
Tomás Vivanco es Arquitecto, Magister in Advanced Architecture from the Institute of Advanced Architecture of Catalonia (IAAC); Magister in Advanced Design de ELISAVA, y PhD (c) en Arquitectura & Urbanismo, grupo Digital Futures de la Tongji University, Shanghai. Ha co-editado y publicado los libros How to revitalize cultural heritage through innovation and digital fabrication?, Fabricating Society, y The Counterculture Room. Fue co-organizador del 13vo encuentro mundial de Fab Labs, Fabricating Society Santiago 2017. Sus proyectos y artículos científicos han sido publicados y expuestos en Australia, USA, Canadá, Chile, China, Colombia, España, Inglaterra, México, entre otros. Su trabajo se centra en diseño distribuido, tecnologías digitales para el desarrollo de comunidades y ecosistemas sostenibles, inteligencia artificial para sistemas materiales bajos en energía. Actualmente es director de la estación regional Fab Lab Austral UC; investigador en Fab City Global y del Centro Internacional para Estudios del Cambio Global y Conservación Biocultural; co-director del Master in Design for Distributed Innovation (Fab City); y profesor de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Tomas Diez Ladera es un urbanista nacido en Venezuela que se especializa en fabricación digital y sus implicaciones en el futuro de las ciudades y la sociedad. Es co director y patrono del Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña donde también es investigador y tutor. Colabora en proyectos, eventos y programas con la Fab Foundation, como Fab City, Fab Conferences y Fab Academy en todo el mundo. Actualmente es Director Estratégico de Fab Lab Barcelona en IAAC, codirector del Máster en Diseño para Futuros Emergentes, así como socio fundador y Director Ejecutivo de la Fundación Fab City y del Meaningful Design Group Bali.
Tomas ha participado en proyectos tecnológicos y sociales como planes de rehabilitación de zonas marginales de Caracas, la instalación Hyper-hábitat para la XI Bienal de Arquitectura de Venecia, la primera casa solar en Barcelona: la “Fab Lab House” para el Solar Decathlon Europe 2010 en Madrid, y el lanzamiento de Fab Labs en ciudades como Lima (Perú), Addis Abeba (Etiopía), Ahmedabad (India), Barcelona, ??entre otras. Tomas cofundó en 2010 los programas “Fab Labs and Informalism” y “Smart Cities by Smart Citizens ”, ambas agendas de investigación hacia el uso de las TIC para el desarrollo de plataformas ciudadanas para la producción de la ciudad, que le llevaron a fundar el proyecto Smart Citizen. Smart Citizen fue crowdfunding en dos campañas y ha formado parte de diferentes proyectos de investigación dentro de la Unión Europea en el marco de H2020.
Su investigación se centra en comprender la relación entre tecnología y humanos para la creación de una nueva economía basada en d infraestructura de fabricación distribuida y arquitectura de datos, a través de plataformas abiertas a escala global, que podrían permitir la producción local de (casi) cualquier cosa en ciudades y asentamientos humanos en todo el mundo. Fab City Global Initiative es el proyecto principal que integra estos intereses de investigación, que lidera junto con socios individuales e institucionales como el Center for Bits and Atoms del MIT, IAAC, la Fab Foundation, el Royal College of Arts, el Danish Design. Centro, Ayuntamiento de Barcelona, ??Ayuntamiento de París, entre otros.